domingo, 23 de marzo de 2014

DESDE TÚNEZ

   
     Seguimos generando información desde Túnez, Libia y Egipto desde antes de la llamada primavera árabe, aunque sin duda esas revueltas han supuesto un cambio trascendental en esos países que desde entonces se encuentran en   una metamorfosis constante, que nos suponen un desafío informativo. En esta ocasión nos hicimos eco de una noticia insignificante en apariencia, pero que denota el verdadero interés de un pueblo por cambiar un rumbo incierto y que lo único que aspira es a buscar un futuro en paz como base de su desarrollo , nos referimos a las declaraciones de Moncef Marzouki, presidente de Túnez, quien visitó una exposición judía en Purim, invitado por la asociación Dar El-Dhekra (Asociación para la Salvaguarda y Promoción del Patrimonío Judío Tunecino) durante la celebración  en el que el que el judaísmo conmemora el milagro de la Reina Esther, salvando a su pueblo de una masacre. En la  exposición  se trataba de poner en valor la herencia judía de Túnez ante los ojos de los jóvenes de ese país, de todas las religiones y orígenes.
     El  presidente Marzouki declaró que Tunez es tierra de paz, convivencia y fraternidad y que rechaza la discriminación entre sus ciudadanos, "La identidad árabe islámica es la base del país, pero en la historia de Túnez hubo un Túnez judío, un túnez cristiano, un tuñez amazigh y un tunez fenicio y debemos estar orgullosos de ello" declaró Marzouki.
    Palabras que han calado en la comunidad judía que califica el gesto como positivo, en un mandato que muchos han definido como caótico.
    Conocimos de la comunidad judía tunecina a través, precisamente, del presidente de la asociación Dar El - Dhekra, Jacob Lellouche, en unas charlas en el instituto Cervantes de Túnez, quién nos habló de una comunidad asentada en este país desde hace más de 2300 años y que ha sufrido persecuciones y atentados, desde el control de ese país por los nazis que supuso una persecución sistemática de la comunidad judía en el transcurso de la II Guerra Mundial, a los atentados integristas de 1982,1983 o el último de 2002, revindicado por Al Qaeda, en el que una explosión en las proximidades de una sinagoga dejó 21 muertos.


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